Palm

Era 1 de Noviembre, su cumpleaños era el 26, pero decidí anticiparme y empezar a buscar su regalo. Tenía la ocasión de comprar una palm por un precio bastante inferior a su valor de mercado y lo hice. No había pensado al hacerlo que tengo un problema bastante grande al respecto, y es que cuando tengo algo en mis manos que me hace mucha ilusión regalar no puedo aguantar más de un día sin entregarlo a su destinatario.

Así, 20 días antes de su cumple, la susodicha estaba mirando con una grandísima sonrisa de satisfacción su juguetito (aunque quizá me mole incluso más a mi que a ella) y en estos días los dos nos hemos sumido en un mundo de amor a la tecnología mucho más que nunca.

El aparatito está genial, funciona que da gusto, tiene miles de aplicaciones rulando por internet y juegos super adictivos. Estaba encantado, hasta ayer. Ayer todas mis frustraciones informáticas se plasmaron en ese magnifico bicho (que culpa tendrá el pobre).

Resulta que uno de los programas que venían instalados en la palm es el documents to go, un gestor de documentos de word, excel y powerpoint. Pues bien, al ir a meter unos documentos el dichoso programita no se abría y no podía sincronizar la palm con el ordenador. Despues de muchos intentos, colgadas varias, reseteos...etc decidí desinstalar el programa del ordenador y volver a instalarlo. El programa no lleva uninstall así que lo tenía que desinstalar desde el panel de control. Cual fue mi sorpresa cuando en mitad del proceso, el mismo se queda parado y no tira ni para alante, ni para atrás. Nuevo reseteo, y con él mi mayor desesperación. El dichoso programa ni se desinstala, ni se puede volver a instalar. Pruebo a instalar una nueva versión. Parecía que todo había ido de maravilla y que iba a solucionar mi problema, pero nainas. La maldita versión anterior seguía allí tocando las narices e impidiendome mis propósitos. Finalmente creo que lo único que voy a poder hacer es formatear el ordenador e ir instalando trabajosamente esos programitas que poquito a poquito van inundando tu escritorio y cuando piensas en hacer una limpieza ves imposible deshacerte de ellos.

Nunca me he sentido tan frustrado con la informática como ayer, pero bueno, sigo encantado con nuestra nueva maravilla.

Eso sí, parece que por fin he aprendido a utilizar el lastfm. No sé como lo hacía que siempre acababa sonando música que ni por asomo quería que sonara. Esta mañana por fin ha sonado lo que quería oir, me ha acompañado durante la jornada de trabajo y ha conseguido que hiciera olvidar por un momento mis frustraciones informáticas.

Eso sí, hoy sigue siendo un día maravilloso, hace un sol radiante, todo excepto windows sigue pareciendo increible y tengo ganas de actualizar el blog.

Hasta pronto amig@s